Revelación de media noche

sábado, 19 de diciembre de 2009

Un mes sin nada que querer decir aquí.  Cuatro semanas de más cima que montaña rusa... pero ya, ya caí, y reponiéndome del porrazo vuelvo a este blog que se hasta se quedó a media manita de gato.

Resulta, queridos lectores, que mentí.  Que cuando decía que quería estar sola, mentía por omisión.  Mi divorcio se dió a raíz de varias circunstancias que se fueron sumando durante ocho años, pero el verdadero detonante fue mi involucramiento en un "coqueteo cibernético".  Por un lado, yo me distraje y por el otro mi ahora ex marido leyó un intercambio de mensajes y me pidió el divorcio.

Voy a ser injusta al ahorrarme los detalles de ires y venires de este coqueteo, y voy a ser grosera, de hecho, en bautizar así lo sucedido. 

Mi matrimonio estaba desahusiado desde hace años, eso lo tengo claro, así que no hay culpables. En lo que no tuve la claridad necesaria, fue en mi tendencia de enamorarme de quien no se acabaría enamorando de mí.

Antes y durante mi separación, tener esas conversaciones con él, me hicieron sentir acompañada y deseada. Después, sentirlo cerca, aunque ausente de sentimientos hacia mi, me recordaba que con él podía ser sincera en cuando a lo que realmente había pasado en mi truene.   Ahora, ya no son promesas de que no se va a enamorar de mi. Ya no son confesiones de lo que no cree que funcionaría entre nosotros.  El inicia o considera iniciar una relación con alguien. Digamos que hizo una selección de la siguiente mujer en su vida, sin siquiera considerarme en el reclutamiento.No lo culpo, de tener control sobre mi, tampoco lo hubiera considerado. 

Poco importa lo que pienso y las conclusiones a las que he llegado, lo que pesa en el centro del pecho y lo que moja mis mejillas, es lo que me hace sentirme muy equivocada. De pronto, descubrí que estoy parada en medio de un bosque, en la completa obscuridad, preguntándome qué diablos hago ahí si le tengo tanto miedo a la falta de luz, a sentirme abandonada y cambiada por alguien más.

Por fortuna, en ese bosque hay algo que me es familiar y me hace sentir acompañada: este blog que nació tarde y empieza a morir temprano.

En el colmo de la vida, alguien me pide una oportunidad para enamorarme, mi primera respuesta es no. Pero, insiste y dice una serie de melosidades que en un principio me resulta absurda, luego molesta, hasta que empieza a sonar como música tranquilizante.  

No son los hechos, sino los aprendizajes que me trajeron a escribir hoy.   Si, me enamoré de quien no me iba a corresponder... enamoramiento de ilusiones y deseos de chocolate.  Lo que yo tengo, las tres cosas que están intactas en mi, tienen suficiente fuerza de gravedad. Podré no estar segura de algunas cosas de mí, pero cariño y amor lo despierto en la gente.  No sé cuándo se dará la mezcla perfecta de amar y ser amada, pero se dará, lo sé.

Aventarme a la soltería a los 34 años fue un acto de coraje y Fe, quizá necesitaba un resbalón más para juntar más coraje y Fe para continuar.  Es difícil creer que todo irá bien cuando hay un corazón roto de por medio, cuando hay tantos autoreclamos que hacer. El tiempo y los post dirán el curso que toma mi historia.

5 comentarios:

Anónimo,  10:09 a. m., diciembre 19, 2009  

¡Hola Bárbara!
Quisiera inventar una palabra que mitigue tu sentir. Quisiera juntar mis letras y que te pudieran hacer compañía.
No es momento de sermones, ni de buscar culpables o razones. Es tiempo de sobrevivir este oscuro momento.
Cuando la pena es muy grande, vale llorar porque el alma duele. Una lágrima en tu mejilla, es símbolo del dolor que sientes, pero nunca de cobardía.
Si escribir en este blog te hace bien, hazlo. Escribe lo que sea, saca lo que tienes dentro.
Reza o maldice (ambas funcionan) y a la distancia te darás cuenta, que la experiencia es lo que se gana cuando se pierde.
Estas en un momento muy vulnerable y si en algo te pudieran valer mis garabatos, no es un buen tiempo para iniciar otra relación u otro romance. Aquella frase “Un clavo saca otro clavo” sólo es un dicho y no una verdad. En todo caso “Dos errores no hacen un acierto”. Si aquel pretendiente es sincero sabrá esperar (sin molestar) a que las aguas se tranquilicen.
Hoy los tiempos cambiaron. En la actualidad 34 años en una mujer es una edad estupenda, es más, adquieren mayor belleza, experiencia, conocimiento y madurez que antes no tenían. Así que prepárate porque te van a llover pretendientes.
Espero pronto pase este trago amargo y vuelvas a sonreír.
A lo hecho pecho. Pisa fuerte, soporta parada, que todo esto ya pasará. Mientras tanto, si te sirve de algo, yo estoy de tu lado y sólo quiero que vuelvas a sentirte bien.
¡Saludos Bárbara!

Juan Carlos

Barbara 8:52 p. m., diciembre 19, 2009  

Juan Carlos, tus palabras alivian la desesperanza. Tienes razón, no es tiempo de otra relación, eso lo sabía y lo sigo sabiendo, pero ya ves, soy tan imperfecta como puedo llegar a serlo.

En tus intervenciones en el blog, tanto para mis post como en los de Peter, has sido tan certero y empático que estoy intrigadísima sobre quién eres, tienes algún blog?, como diste con este?

Gracias por tu acompañamiento, de verdad, gracias.

Anónimo,  3:58 p. m., diciembre 20, 2009  

Hola Bárbara ¿Te preguntas quién soy?
Soy un profeta sin tierra, esclavo de su libertad, que vive libre de riquezas. Un catador de lo simple, admirador de lo bello. Coleccionista de alegrías, un Quijote de las tristezas, conversador empedernido, bromista de ocasión y ladrón de alguna sonrisa. Me pongo rojo cuando siento vergüenza, pero no callo de vergüenza, si acaso tengo que pedir “perdón”.
La verdad, no tengo Blog, no sabría que escribir en él. Prefiero el lapicero al teclado, los libros que al monitor. Soy lector entusiasta, pero un mal escribidor.
¿Cómo di con tu blog?
Como todo lo bueno que trae la vida. Te apareciste de repente sin que te buscara, como si la casualidad quisiera decirme que la suerte si existe. En algún lugar (no me acuerdo donde) leí tu nombre: “Barbara”, y solo sentí la necesidad de ingresar.
Como vez, soy un hombre como cualquiera, uno más entre millones, de todo el mar sólo una gota, soy como un dado que avanza por la vida dando tropezones, no me creo un genio, ni me siento idiota, solo un aspirante a ser humano, dueño de mil defectos y una sola virtud… saber que soy afortunado, porque a estas mis letras… las estas leyendo tú.
¡Saludos Bárbara!

Juan Carlos

Barbara 4:22 p. m., diciembre 20, 2009  

Algún día, Peter y yo platicabamos sobre tus comentarios Juan Carlos tan ecuánimes y empáticos. Nosotros encantados de que seas nuestro lector (mientras Peter no renuncie oficialmente al blog, lo cuento).

Creo que el mundo virtual sería afortunado si te pudieramos encontrar en algún lugar del mismo. Con el tiempo se aprende a amar el teclado y a dejarse llevar por la mente o el corazón, mientras las palabras quedan inmortales en la web. Espero que un día, cercano, te animes.

Por lo pronto, gracias nuevamente por venir, por leer, por comentar y ahora, por presentarte.

Anónimo,  11:59 p. m., diciembre 20, 2009  

Qué limbo queda después de terminar una relación, qué impresionante. No hay modo de que sea mejor. El tiempo se vuelve un hoyo que parece no tener fondo y ¡el futuro que no llega, el muy cabrón!

Qué rico tener foro para decir.

Miles de abrazos

Publicar un comentario

  © Blogger template The Professional Template II by Ourblogtemplates.com 2009

Back to TOP