Tocando fondo

lunes, 21 de septiembre de 2009

Hace algunos meses visite a mi hermano. El paso por un divorcio y una de las primeras preguntas que me hizo fue "ya tocaste fondo?". En ese momento mi espiritu estaba mucho mejor que ahora. Tenia esperanza de que el tiempo y la separacion momentanea ayudaran a curar heridas. Mi primer instinto fue contestarle que si. Al paso de las semanas que pase con el me di cuenta de que en realidad no lo habia tocado; el tener la soledad tan tangible me hizo llegar a un nuevo fondo.

Ahora que comienzo a buscar un departamento para mudarme siento como toco un nuevo fondo. Quizas nunca llegue totalmente a tocarlo. Sera doloroso el mudarme a vivir con alguien mas (nunca he compartido piso en mi vida mas que con mi esposa); sera dolorosa la primer noche en otra cama (si bien sera mas comodo que el sofa). Seran dolorosas las despedidas en los dias que vea a mis hijas. No quiero pensar en cuando mi esposa comience a salir con alguien. Tantos peque~os dolores por venir.

Despues de tres dias seguidos de alcohol me doy un respiro. Le doy un descanso al higado. Se que el alcohol no me llevara a nada bueno. Solo me queda una vez mas tratar de retomar la filosofia de "un dia a la vez". Si, esta siendo estupidamente doloroso, pero no hay nada mas. Como bien recomienda nuestro estimado lector, hay que apretar los dientes y mirar para adelante.

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